Existen diversos tipos de abrazos, pero será la manera de sentir de cada cual y el momento en el que se abraza el que determine cuál es el más adecuado:
- Abrazar por la espalda: Cuando se abraza desde atrás rodeando la cintura de la otra persona con ambos brazos y se estrecha tiernamente. Típico de parejas o de ternura hacia un hijo.
- Abrazo de oso polar: El que se realiza cuando una de las personas es de mayor estatura. Es un abrazo protector y con el que se quiere expresar nuestra incondicionalidad hacia la otra persona.
- Abrazo cuerpo a cuerpo o de corazón: Es la forma más intensa de abrazo. Es largo, lleno de afecto y sinceridad. Casi las almas se funden para expresar el inmenso amor que se siente buscando una conexión espiritual.
- Abrazo espontáneo y vigoroso: Lo utilizamos cuando queremos dar fuerza o suerte a alguien, pero de una manera rápida y apurada
- Abrazo de grupo o grupal: Cuando varias personas buscan la motivación ante un proyecto común o festejan un objetivo alcanzado
- Abrazo lateral: Cuando las parejas o dos personas con cierta confianza, pasean con complicidad agarrándose por la cintura
- Abrazo a la naturaleza: Abrazar los árboles está cada vez más de moda. No olvidemos que todo ser vivo es energía. Al igual que nosotros, los árboles tienen la suya propia. Abrazarlos nos ayuda a establecer contacto con el poder de la naturaleza, nos proporciona herramientas para sanarnos, relajarnos, fortalecernos y cargarnos de energía vital. Son portadores de los mensajes de la Madre Tierra.
Abrázalos y comenzarás a notar sus beneficios.